lunes, abril 26, 2010

Un boton.


A esta hora, y en una idea que pronto desarrollare con mas vigor, recuerdo aquellas clases del afamado don Agustin en Introducción al Derecho, cuando, apoyado en otro autor, nos relataba aquel concepto formal de la democracia. En resumen, pues no viene al caso hablar de esto aca, era que cumplido tres requisitos era posible tener por valido un regimen de gobierno.

Pues bien, trayendo aquellas lejanas clases, y tras escuchar en el viaje en tren un ringtone de starwars, me permito calificar entonces como legitimo al Imperio (maligno imperio), porque segun se ve en la trilogia nueva -no en la original- el poder del emperador y su accionar al fundar el imperio en si, provino de una decisión adoptada por aquel organo llamado a representar a la republica toda: el Senado Galactico.

Ocurrido ello, legitimo gobernante era el Imperio, y la Alianza, una vil insurrección.

Mal Luke, bien Palpatine.

lunes, abril 05, 2010

De la religion


Ahora que paso reciencito nomas la semana senta, y en que nadie fue a misa, ocurrioseme escribir sobre un tema que bastante mas de la mitad de mi vida, me da vueltas en la cabeza y que la calienta no pocas veces: la religion.

La religion, a mi modo de ver, es unicamente un vehiculo un intermediario que nos une con nuestra creencia mas intima y a la que nos aferramos, ciertamente, en los momentos mas dificiles. Tuvo, en su origen, ese afan de religar al ser humano con ese poco material mundo, cual es la divinidad, y mas abstractamente la fe en lo que no vemos.

Pues bien, y en esto creo escribir de pluma propia, y puedo estar errado , no comprendo la religion, al menos no en este momento. Si tal vez la religion (o mejor restingimos a la judeo crisitana, que es la más cercana, y de la cual creo y quiero hablar) es nada mas que un conjunto de sistemas y formas de actuar que se estructuran en pos de las creencias en un mensaje o afirmadas por un lider o fundador, con pretensiones de esperanza, mi visión actual de la religión- bien entendida, o mejor dicho bien ejercitada- pasa mas que nada por el ejemplo que por la fe.

Siempre he pensado sobre ¿qué ocurrira si Cristo viniese a la tierra y en un -válido y justo por lo demás- ejercicio actúa pidiendo (cual tribunal de cuentas) a toda la manga de almas sobre las que tal vez asumio su liderazgo espiritual: ¿a quién preferirá Jesus?, por que tiene que preferir a alguien, de ahi el cielo y el infierno, ¿El ejemplo? o la fe?. Es como esa vieja discusión reformaria luterana.

Entendamos así, el ejemplo: actuar como él, con nuestras limitaciones humanas. En simples premisas tales como, y que a esta hora -formacion colegial crisitana mediante- me vienen a la cabeza: perdona 70 veces 7, amar a los demas como a si mismo, o tomar prestado pasajes al cura hurtado: hay que dar hasta que duela, etc.

Por otro lado, entendamos por fe, simples principios tales como: rezar ilimitadamente, esperar intervenciones divinas a cambio de rezos, ir a misa devotamente, pertenecer a congregaciones o cultos tales como el opus dei, schoenstatt ( en las cuales no veo a cristo si viene mañana), cantar en misa en primera fila, comulgar con cara de sacramento, etc, en el fondo: mi culpa, mi culpa mi gran culpa.

Conozco a muy pocos que a mi juicio puedan cumplir con a y b. Ahora, sin duda es más facil la vía b, la via de la fe. Es más comoda, y al parecer -y en esto procedo a mezclar peras con manzanas-, es más reconocido socialmente. Elemento último que es irrelevante en la discusión general, pero no a la hora de tomar, sobretodo por las apariencias, un camino u otro.

Mi conflicto entonces pasa entonces, y yendo al hueso, por aquellos que son capaces de ir a misa al dia siguiente de haber faltado a aquello que repiten domingo tras domingo (ejemplos sobran). Porque la sumatoria de esas almas conforman ese grupo que reune a una comunidad religiosa.

No quiero usar la trillada palabra consecuencia, pero es la única que se me ocurre a la hora de despotricar, a esta altura de mi vida, contra la religión, que, y no se si siendo extremo, no haya nadie tal vez, insisto tal vez, merecedor de integrarla.

Ni el papa se salva, y de ahi para abajo. Que queda pal resto.